Los chakras son, en pocas palabras, los centros de energía que conectan al ser humano con su entorno. En Reiki resulta fundamental manejar el concepto de chakras y su significado es bastante simple: Son ruedas recolectoras de energía, dispuestas a lo largo de la columna vertebral desde su base hasta la coronilla y conectadas con los distintos órganos del cuerpo. Deepak Chopra profundiza en el término de estos remolinos energéticos refiriéndose a ellos como “puntos de fusión entre la conciencia y la fisiología”.
En la filosofía del Reiki se reconoce la existencia de siete chakras principales distribuidos a lo largo de nuestra espina dorsal. A su vez, hay otros 100 de menor tamaño, repartidos por toda nuestra anatomía.
Los siete chakras principales son:• Chakra 1º raíz
• Chakra 2º sacro
• Chakra 3º del plexo solar
• Chakra 4º del corazón
• Chakra 5º de la garganta
• Chakra 6º del tercer ojo
• Chakra 7º corona
Estos centros energéticos giran constantemente sobre su propio eje en el sentido de las agujas del reloj y funcionan como esponjas que absorben energía del entorno para transmitírnosla a nosotros, cumpliendo dos funciones: Nutrir las distintas partes del cuerpo y alimentar el aura.
El funcionamiento correcto de los chacras implica que:
1. Se producen giros constantes e ininterrumpidos en el sentido de las agujas del reloj, habiendo armonía entre todos los chakras.
2. Se nutren las distintas partes del cuerpo.
3. Absorbemos la energía universal vital (Reiki) para que se distribuya a través de la red de meridianos y nadis.
4. Nos sentimos bien.
Por el contrario:
Un comportamiento anómalo supone que:
1. Giran en sentido antihorario o se estancan, definiéndose como “chakra Reiki cerrado“.
2. La persona experimenta dificultades en las áreas de la vida que rigen esos chakras cerrados.
3. Hay un déficit o exceso energético en ese chakra y, por tanto, desequilibrios en los demás puesto que hay uno estancado.
4. Nos encontramos mal.
Por tanto, cuando estamos sufriendo estamos perdiendo energía a través de los chakras… ¡Nos van drenando fuerza!
Armonizar los chakras con Reiki es una técnica por la que el terapeuta contribuye al equilibrio de estos “generadores” guiando la energía necesaria a cada uno de ellos, bien porque hay falta o bien porque sobra. Los objetivos que se pretenden con esta armonización, y ayudados por los símbolos de Reiki, es obtener, no solamente salud, sino bienestar y paz.
Conclusión: El ser humano viene al mundo para ser feliz. Empeñarse en ir contra esa felicidad originaria es enfermar.
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